viernes, 24 de octubre de 2014

¿Animales de sangre fría?



Solo ceniza suspendida en el aire y desolación  Ni rastro de vida. El fuego era el   único elemento de la materia visible a su alrededor y un calor volcánico dominaba sobre la naturaleza ausente. Él, perdida la mirada, sin fuerzas para volar, se tambaleaba invertebrado por el borde del desfiladero, anclando débilmente, a cada paso,  las garras en la roca. Visiblemente enfadado, con el corazón saurio herido y el llanto ocelado, mudando escamas de dolor en cada movimiento de su cola.
No pudo  tragarse las llamas que arrojaba por la boca en cada suspiro al recordar la infidelidad de su amada.



5 comentarios:

  1. Estudio calentito de los celos. Preciso y detallado.
    Felicidades por tu puesto de finalista en el Wonderland de esta semana!

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    1. Mei gracias por el paseo y el comentario, te debo lecturas que ando retrasado. Abrazos pedazo de talento.

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  2. Los dragones, de fuego en la mirada y llamas en el corazón, sólo dejan salir por la boca, en poquitas palabras, el volcán que regentan con más voluntad que tino.

    Me gustó. Un cordial saludo.

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    1. Bonito remate como siempre Albada que además de comentar creas con tus opiniones, eres una crac. Gracias por seguir aún por este blog. Abrazos

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  3. Poético y lleno de fuerza. Te veo inspirado, Maestro. Este año se hablará de ti y de tus letras. Seguro. Un abrazo :)

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