Mostrando entradas con la etiqueta mucho me temo que vienen a rescatarme. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta mucho me temo que vienen a rescatarme. Mostrar todas las entradas

lunes, 23 de junio de 2014

Estocolmo

Mucho me temo que vienen a rescatarme, oigo sirenas, carreras en el piso y gritos. Ahora que ya me he acostumbrado a su manera de ser, a su forma de pedirme siempre que me arrodille al practicar sexo y a su empeño de tenerme sólo para sus ojos. La relación entre nosotros está progresando mucho y desde ayer  me quita la mordaza durante el día con la única condición de no decir ni una palabra. Ya no lloro, ni grito en silencio, y empiezo a creer lo que dice, que nadie me quiere excepto él, que soy una zorra y que lo nuestro está escrito.