viernes, 27 de febrero de 2015

Juicio Gastronómico

Todos en la sala sabíamos que las pruebas del delito eran productos gourmet procedentes de decomisos. Manjares selectos incautados en algún puesto aduanero. Exquisiteces encontradas en el doble fondo de un vehículo localizado por el fino olfato de un perro detector.
Artículos de lujo que alguien revendía a otro alguien, y éste al conocido de un amigo, y el amigo nos lo hacía llegar siguiendo un plan perfecto de distribución con una arquitectura piramidal de referidos.

 Sin pensar en las consecuencias que pudieran derivarse en el futuro el Juez, salivando, permitió dada la hora, un receso para dar testimonio de la calidad de aquellas delicatesen y convirtió el sueño de todos los presentes en realidad permitiendo que diéramos buena cuenta de aquellas viandas guiados por el experto paladar del acusado y con el ánimo, como marca la ley, de que nada llegara al público fuera de su fecha de caducidad.

Nota: Apuesta por el certamen de abogados para el mes de febrero. Palabras obligadas: decomiso, plan, futuro, sueño y testimonio.

viernes, 20 de febrero de 2015

Negocios sucios

Era la primera vez que pasaba una noche entera sin dormir. Me disfracé de enfermera, de monja  y hasta de maestra o secretaria con plumas y unas gafas enormes.
Algunas veces, él se acercaba y me ponía accesorios: un parche en el ojo, diademas con falsos brillantes, pelucas de muchos colores y zapatos con tacón de aguja-como los que usaban las grandes actrices- y faldas muy cortas de colegiala. Entonces, nada me extrañó, ni siquiera que el señor y yo jugáramos juntos en la misma cama y que al día siguiente entregara a mi padre un fajo de billetes.



Ilustración de Amparo Martínez Alonso.

viernes, 6 de febrero de 2015

Amistades Peligrosas

En un plazo breve de tiempo se organizó el diseño  de un calendario de fiscales y abogadas posando desnudos para recaudar fondos en beneficio de una organización que tramitaba peticiones de asilo.
Aquel suceso valiente se convirtió en un fenómeno social sin precedentes que marcó  la vida de muchos de ellos, modelos improvisados, hombres y mujeres de leyes al desnudo  que retrataron sus cuerpos, ante el objetivo de la cámara, en posturas sugerentes y provocadoras, escuetamente cubiertos por el fino tacto de unas togas de seda y un birrete que servía de accesorio para soltar la rigidez de los no iniciados en la materia

Los calendarios se vendieron como churros, surgieron historias desenfrenadas, las abogadas tuvieron más clientes de los que nunca hubieran imaginado, los fiscales también, acusando a sus defendidos, y entre ellos, no podían evitar guiñarse un ojo o lanzarse miradas cómplices en cada vista que se encontraban.

Nota: presentado en el mes de enero en el Concurso de Microrrelatos de Abogados
Palabras obligadas: Calendario Asilo, Fenómeno, Fiscal, Breve.