-Muero por ti-le gritó, un paso atrás, el
amante despechado abriéndose de un tajo las venas.
-Eso se lo dirás a todas-respondió ella sin
saber de la sangre derramada.
-Mi vida es tuya- y se abrió el vientre
salpicando en rojo las vías.
-Lo dices por decir- y no quiso girar la
cabeza mientras subía al vagón.
Al pie de
la ventanilla, le suspiró un “Te quiero con toda mi alma” y le ofreció un
órgano teñido en óxido que había extraído de una zona cercana al corazón.Nota: Apuesta para REC (Relatos en cadena) de la SER para la semana 12. Frase comienzo:"Naricilla respingona y un cuerpazo de escándalo"
Tiene mucha fuerza. Merece ganar.
ResponderEliminarSuerte y un abrazo.
Un beso.
Isabel, gracias por tus palabras, ojalá hubieras estado en el jurado esta y otras ocasiones jajaja.
EliminarAbrazos, te debo lecturas.
¡Jooder! sin más. ¡Qué tétrico! abrazo incondicional Montesinadas
ResponderEliminarD.Ramón, gracias por tus paseos por Montesinadas. Sí algo tétrico sí que es, pero si lo piensas, todas estas barbaridades se dicen sin pensar.. jaja
EliminarAbrazos te leo.
Pues vaya, para uno que encuentra dónde está el alma y no vivirá para contarlo, je je.
ResponderEliminarPues no es poco original tu manera de resolver la frase Montesinos.
Suerte para la próxima.
Nos leemos. Abrazos.
Jajaja D.Miguel siempre atento a otras posibles lecturas. Cierto, es el primero de mis personajes que encuentra su alma o a saber porque en el estado que estaba lo mismo era algo mucho más carnal. Jajaja.
EliminarAbrazos
Qué tremendo! Mucha suerte. Saludos.
ResponderEliminarBea C.E
Gracias Bea, sí es tremendo pero es literlamente las frases que decimos. Ponlas en un dibujo y es tal que esto, aunque quizás exageré un poco, pero quería hacerlo trmendo.
EliminarBesos nos seguimos y leemos.
Montesinadas, me encantan estas imágenes tan truculentas y con esa fuerza visual porque sí, he visto la sangre de las venas, ese vientre abierto y ese órgano ensangrentado y desconocido que por lo que nos cuentas es el alma (nunca me la había imaginado así jeje).
ResponderEliminarMe ha gustado mucho!
Enlazo tu blog en el mío para poder seguirte mejor (como diría caperucita)
Suerte para la próxima!
;)
Gracias Pulga, nos perseguimos, incluso podemos acosarnos literariamente. Abrazos y gracias por la lectura la visita y el comentario.
EliminarProbablemente le habrian ofrecido tantos regalos que no reparó en uno que valia la pena aceptar.
ResponderEliminarGran relato Maestro, como de costumbre.
Un saludo.
D.Carabias, el tuyo tampoco quedó atrás con esa reunión que a saber cómo acabó.
EliminarMe alegra que te haya gustado.
¡Qué bueno! Me encanta tu micro, contundente y genial.
ResponderEliminarMucha suerte con la criatura.
Un abrazo.
Rakel cuanto tiempo te debo visita y de hoy no paso.Gracias por tus palabras. Abrazos siempre te espero.
EliminarMe gusta, una pena que no llegara.
ResponderEliminar;)
Holaaa Yolanda, maestra, pues si no llega pero me leéis personas como tú, dejo de ser un amante despechado jeje.
EliminarYolanda, impenitente del micro... una alegría verte y leerte por aquí y en cualquier otro sitio.
ResponderEliminarNunca se sabe, ya es premio teneros por aquí.
Abrazos te debo lecturas.
Con muestras de amor como esta...casi que prefiero que nadie me quiera de esa forma. A mí es que la sangre me marea, y tú lo has escrito tan bien que estoy medio 'volada' (porque he visto las vísceras, venas, el alma bañada en sangre... ayyyy)
ResponderEliminarQuedan muchas semanas de concurso, ¡no desesperes porque algún martes sonará tu teléfono!
Besos amigo y el próximo...sin sangre.... :)
Jajajaja, hola Laura, gracias como siempre por tus paseos por Montesinadas.
EliminarSí sangre había la verdad, el siguiente va sin sangre pero con grasa de más jaja.
Abrazos artistaza.
Lo que me dejas es con la intriga de saber si arranca el tren o no... y de si realmente es un robot o un hombre... o ambas cosas. Muy bueno, como siempre.
ResponderEliminarUn abrazo, amigo.
Jajaja Luis tu siempre quieres ir más allá, por eso te salen esos pedazos de escritos.
EliminarPues no, desde luego que no es ningún robot. Cuántos, casi llegan a hacer esto. Si hubiera contado un suicidio normalito por despecho se asume, pero si doy detalles ya es truculento jajja.
Y sí el tren se marcha, como la vida sigue ante un fracaso de amor y no se detiene aunque llores la ausencia o te tires por una ventana o manches el andén de almas oxidadas.
Abrazos voy a tu casa ahora mismo
Un poco gore, él; y esquiva ella.
ResponderEliminarAhora... yo al final habría reaccionado como ella, esquiva o no. Demasiada sangre y demasiadas visceras.
No obstante, por lo extremo, por lo diferente, por lo arriesgado, me gusta el intento.
Hola Luisa, gracias por la visita.
EliminarSí, pelín exagerado, los dos personajes sobreactúan.
Creo que ver el programa de Rasca y Pica de los Simpson con mis hijos me está perturbando. Qué no hará en la mente de mis adolescentes.
La vida es riesgo.
Abrazos no dejes de visitarme y yo no dejaré de estar a la altura de tu visita.
Truculencias del amor, desgarros de alma enamorada ante la pasividad del otro.
ResponderEliminarMuy bien narrado, aunque un poco frío al pensar que tenia el corazón oxidado. ¿ sería por sus desplantes?
Un saludo
Puri
Hola Dulcinea, me alegra verte por aquí. Sí algo oxidada debía estar, alguien que hace esas cosas no podía tener un alma blanca, y sí quizás fuera por tantos despechos, quién sabe?
EliminarAbrazos
Madre mía que micro más fuerte, desde luego impacta profundamente al lector. Un abrazo, Sotirios.
ResponderEliminarSotirios gracias por la visita te debo lecturas que ando muy ·pillao de tiempo" y me agrada saber que te ha impactado.
EliminarAbrazos